viernes, 16 de noviembre de 2012

Unidad 3. La argumentación. Falacias.


Falacias
Una falacia es un razonamiento no válido o incorrecto pero con apariencia de razonamiento correcto. Es un razonamiento engañoso o erróneo (falaz), pero que pretende ser convincente o persuasivo.

Todas las falacias son razonamiento que vulneran alguna regla lógica. Así, por ejemplo, se argumenta de una manera falaz cuando en vez de presentar razones adecuadas en contra de la posición que defiende una persona, se la ataca y desacredita: se va contra la persona sin rebatir lo que dice o afirma.

La falacias lógicas se suelen clasificar en formales y no formales. Empecemos por las no formales.

Las falacias no formales son razonamientos en los cuales lo que aportan las premisas no es adecuado para justificar la conclusión a la que se quiere llegar. Se quiere convencer no aportando buenas razones sino apelando a elementos no pertinentes o, incluso, irracionales. Cuando las premisas son informaciones acertadas, lo son, en todo caso, por una conclusión diferente a la que se pretende.

Falacias no formales
                        Las falacias no formales son razonamientos en los cuales lo que aportan las premisas no es adecuado para justificar la conclusión a la que se quiere llegar. Se quiere convencer no aportando buenas razones sino apelando a elementos no pertinentes o, incluso, irracionales. Cuando las premisas son informaciones acertadas, lo son, en todo caso, por una conclusión diferente a la que se pretende.

El anterior ejemplo de falacia es un caso de falacia no formal: descalificamos la persona que argumenta en vez de rebatir sus razones. La lista de falacias no formales es larga; algunas son las siguientes.
2.1 Falacia ad hominem (Dirigido contra el hombre)
Razonamiento que, en vez de presentar razones adecuadas para rebatir una determinada posición o conclusión, se ataca o desacredita la persona que la defiende.
             Ejemplo:
"Los ecologistas dicen que consumimos demasiado energía; pero no hagas caso porque los ecologistas siempre exageran".                                                                 

Esquema implícito:

A afirma p,
A no es una persona digna de crédito.
Por lo tanto, no p.

2.2 Falacia ad baculum (Se apela al bastón)
Razonamiento en el que para establecer una conclusión o posición no se aportan razones sino que se recorre a la amenaza, a la fuerza o al miedo. Es un argumento que permite vencer, pero no convencer.
             Ejemplo:
"No vengas a trabajar a la tienda con éste piercing; recuerda que quién paga, manda".

Esquema implícito:
A afirma p,
A es una persona con poder sobre B.
Por lo tanto, p.
2.3 Falacia ad verecundiam (Se apela a la autoridad)
Razonamiento o discurso en lo que se defiende una conclusión u opinión no aportando razones sino apelando a alguna autoridad, a la mayoría o a alguna costumbre.
Es preciso observar que en algunos casos puede ser legítimo recorrer a una autoridad reconocida en el tema; pero no siempre es garantía.
             Ejemplo:
"Según el alcalde, lo mejor para la salud de los ciudadanos es asfaltar todas las plazas de la ciudad"
Esquema implícito:

A afirma p,
A es un experto o autoridad.
Por lo tanto, p.
2.4 Falacia ad populum(Dirigido al pueblo provocando emociones)
Razonamiento o discurso en el que se omiten las razones adecuadas y se exponen razones no vinculadas con la conclusión pero que se sabe serán aceptadas por el auditorio, despertando sentimientos y emociones. Es una argumentación demagógica o seductora.
             Ejemplo:
"Tenemos que prohibir que venga gente de fuera. ¿Qué harán nuestros hijos si los extranjeros los roban el trabajo y el pan?"                                                               

Esquema implícito:
A afirma p,
A presenta contexto emocional favorable.
Por lo tanto, p.


2.5 Falacia ad ignorantiam (Por la ignorancia)
Razonamiento en el que se pretende defender la verdad (falsedad) de una afirmación por el hecho que no se puede demostrar lo contrario.
            Ejemplo:
"Nadie puede probar que no haya una influencia de los astros en nuestra vida; por lo tanto, las predicciones de la astrología son verdaderas"
Extraído del libro: PIÑERO, Albert. "Logomàquines" Barcelona: RAPE, 1999

Esquema implícito:

Se niega (se afirma) p,
No tenemos pruebas que p se verdadero (falso).
Por lo tanto, p es falso (verdadero).
2.6 Falacia Post hoc... (Falsa causa)
Razonamiento que a partir de la coincidencia entre dos fenómenos se establece, sin suficiente base, una relación causal: el primero es la causa y el segundo, el efecto. Clásicamente era conocida con la expresión: "Post hoc, ergo propter hoc" (Después de esto, entonces por causa de esto).
             Ejemplo:
"El cáncer de pulmón se presenta (frecuentemente) en personas que fuman cigarrillos; por lo tanto, fumar cigarrillos es la causa de este cáncer"                      

Esquema implícito:
Se da X,
acto seguido se da Y.
Por lo tanto, X es la causa de Y.

Tomás de Aquino Step by Step 6

Explicación del fragmento objeto de comentario

I. La estructura común a las cinco VÍAS PARA LA DEMOSTRACIÓN DE LA EXISTENCIA DE DIOS.


El artículo 3 contiene las cinco vías para la demostración de la existencia de Dios, una vez ha sido acentuado el carácter a posteriori de la argumentación.

Tomás de Aquino recogiendo la definición que Dios da de sí mismo en el libro del Éxodo: yo soy el que soy, establecerá, pro vía demostrativa y basándose en el principio de causalidad, la suprema trascendencia de Dios.

Según esto, la pregunta “Existe Dios? también podría ser planteada en estos términos: ¿Existe algún ser trascendente y superior a todas la cosas del mundo visible, las cuales son gobernadas y dirigidas por Él en función del fin común del universo? Los argumentos que Tomás de Aquino propone para llegar a Dios basándose en la razón natural coinciden todos en privar al mundo de su carácter aparentemente absoluto (en su maldad o autosuficiencia) para poner en evidencia su radical insuficiencia. Es decir, el mundo no se basta a sí mismo. Descubre así en el corazón de todo ser finito una cierta inestabilidad, una contingencia o no-necesidad, que apunta inmediatamente hacia la existencia de un ser que es la fuente de la existencia finita, el autor de la composición esencia y existencia, y que no puede estar a su vez compuesto de esencia y existencia, sino que debe tener su existencia como su verdadera esencia, es decir, existir necesariamente.

Volviendo de nuevo al texto, pasemos a analizar la estructura de las cinco vías propuesta por el aquinate.

Las cinco tienen un mecanismo de desarrollo muy semejante. Todas ellas arrancan de hechos reales de experiencia, fijándose en distintos aspectos de la realidad de los seres del mundo físico. Todas coinciden en la afirmación de que en una serie causal concatenada no se puede proceder indefinidamente, sino que es necesario detenerse en un término. Y todas convergen también en un punto de llegada, que es en la necesidad de la existencia de un ser supremo trascendente, Dios. Podemos representarlas del siguiente modo:
  
Punto de partida
Movimiento
Causas subordinadas
Seres contingentes
Seres relativamente perfectos
Orden del mundo.
Término
Motor inmóvil
Causa incausada
Ser necesario
Ser perfecto
Inteligencia ordenadora.